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En Playboy a los 10: La vida de pesadilla de Brooke Shields

Brooke Shields vida

    Brooke Shields es la actriz con ese rostro que las generaciones más jóvenes hemos visto alguna vez, sin saber quién es en realidad. En el siglo pasado, ella era indiscutiblemente la mujer más hermosa del mundo, una de las actrices más cotizadas, y con una lista de pretendientes que incluía al mismo Michael Jackson, John Travolta y hasta a un príncipe europeo.

Pero detrás de aquella fantasía, ella vivió un auténtico infierno donde fue explotada desde qué era una niña, igual o incluso peor a la vida que sufrieron los actores de Nickelodeon y Disney Chanel que hoy en día han salido a hablar en sus documentales.

¿Quién es Brooke Shields?

Brooke Shields nunca fue nominada a un Oscar, o fue elogiada por su versatilidad actoral como Meryl Street, pero la belleza infantil que tuvo desde jóven sirvieron para que se convirtiera en una destacada modelo. Su rol en filmes emblemáticos como The Blue Lagoon, Endless Love o Pretty Baby la hicieron la ídolo para los de su generación.

Mientras, producciones más modernas como The Greening of Whitney Brown, The Middle o The Boy Who Cried Werewolf la hicieron la típica figura de madre cariñosa para las personas del nuevo milenio. Hoy podrás conocer su oscuro pasado.

Concebida para el éxito

Brooke Shields inicios

Brooke Shields nació el 31 de mayo de 1965 en Nueva York, hija de Teri Shields y Frank Shields. Su carrera comenzó cuando tenía tan solo 11 meses, cuando su madre la hizo participar en un comercial para jabones. Teri había sido modelo y actriz, pero nunca llegó a tener un éxito notable, y se terminó obsesionando con la idea de que Brooke alcanzaría la fama. 

Esto llegó a los extremos de que permitió una sesión fotográfica de desnudos cuando solo tenía 10 años de edad, para una campaña publicitaria de Sugar and Spice, un suplemento de la revista Playboy. Por si fuera poco, Teri tenía problemas con el alcohol que terminaron haciendo que Brooke tuviera que cuidar de ella, mantenerla vida, a la par de que se sometía al escrutinio público.

La fama llegó en 1978 cuando interpretó el papel de Violet, una niña que trabajaba en un burdel junto a su madre. A pesar de lo controvertido del papel, las personas elogiaron la actuación de Brooke, pero sería la película The Blue Lagoon donde se convertiría en un sex symbol, al interpretar a una jóven adolescente que crece en una isla, y descubre su sexualidad al quedar embarazada.

Ese mismo año, Brooke protagonizó una campaña publicitaria para Calvin Klein, donde pronunció la frase "¿Sabes lo que hay entre mis Calvins y yo? Nada". Solo tenía 15 años cuando sucedió todo. Aunque varias personas cuestionaron a su madre por dejar a Brooke someterse a situaciones tan subidas de todo, la actriz siempre la defendia a capa y espada.

El precio de una fama no pedida

Brooke Shields y su madre

Cuando finalmente cumplió la mayoría de edad, Brooke Shields optó por dar un paso atrás a su carrera, y centrarse en estudiar en la Universidad de Princeton la carrera de Literatura Francesa. Aunque este periodo no fue mucho mejor en su vida, Brooke comentó que sus compañeros la acosaban, y le hacían bullying por su pasado como actriz.

Ella volvió a la vida pública con Speed Zone, donde demostraría sus dotes de comedia, alejándose totalmente del drama más pesado. En este tiempo, ella conocería a Michael Jackson con quién tendría muchos problemas, pues mientras el Rey del Pop la llamaba su novia en público, Brooke tenía una relación con el príncipe monaco Alberto de Monaco.

Años más tarde, Brooke admitió sentirse bastante incómoda por las actitudes de Michael Jackson, que parecía no entender que no tenía interés. Otras personas con las que llegó a verse vinculada sentimentalmente fueron Dodi Alfayed, el novio con el que Lady Diana de Gales terminaría perdiendo su vida, y el futuro senador de Estados Unidos, John Fitzgerald Kennedy Jr.

Al final, ella se casó con el tenista, André Agassi, en 1997. Parecía que la actriz logró encontrar su estabilidad emocional, junto a sus seres queridos, pero su primer esposo era alguien que también llegó a maltratarla física y mentalmente. Después de tanto, los dos se divorciaron por el cameo de Brooke Shields en FRIENDS que molestó tanto a Agassi que hizo que eligiera entre su carrera y él.

Procesando los traumas

Brooke Shields documental Pretty Baby

Es finalmente después de los años 2000s donde Brooke Shields logró hallar una genuina estabilidad emocional. Su carrera actoral empezó a ser más reconocida en el teatro donde participó en los musicales Cabaret y Chicago, además de encontrar el amor con su segundo esposo, Chris Henchy, con quien tuvo a sus dos hijas y sigue junto a él hasta el día de hoy.

No obstante, un nuevo golpe azotaba su vida cuando en el 2012 su madre falleció por la enfermedad del Alzheimer. Aunque esto lastimó a Brooke, también la llevó a un punto de inflexión, donde empezó a recapacitar sobre su vida, los abusos que la sometió su madre por lo que siempre la defendió, y los traumas que le ocasionó.

Así fue como terminó lanzando en el 2022 su documental “Pretty Baby: Brooke Shields”, donde cuenta su historia bajo sus propios términos, y revela los problemas a los que la sociedad la enfrentó durante tantos años. Algo que, posiblemente, fue una de las cosas que también impulsó el lanzamiento de documentales como “Quiet on Set” o “Child Star” de Demi Lovato.

Hoy en día, Brooke Shields sigue más interesada en alejarse de los filmes serios, y se decanta por las comedias más ligeras que hacen feliz al público, y ha aprendido a procesar los traumas que ha vivido. Aunque, ha admitido, que su único arrepentimiento en la vida fue no haber confrontado a su madre antes de su muerte, y mucho menos llegar a perdonarla.

Sin duda, la historia de Brooke Shields está llena de resiliencia, muy similar a la historia de Dove Cameron que perdió a su padre de niña, y fue víctima de varios abusos, pero hoy está triunfando en Hollywood. Si te gustó este artículo, puedes leer este otro donde hablamos de el futuro de Dove Cameron en la industria músical. 

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